“Es una tortura”: denuncian temperaturas de más de 32ºC en las aulas de las oposiciones en Castilla y León
El sindicato STECyL-i exige a la Junta que actúe ante el calor extremo en las aulas donde se celebran las oposiciones docentes.
Más de 13.000 personas, entre opositores y miembros de tribunal, afrontan estos días las pruebas docentes en Castilla y León entre sudores, temperaturas que rozan los 35 grados y centros sin ventilación ni aire acondicionado.
El sindicato STECyL-i ha denunciado este jueves las condiciones “inhumanas” en las que se están desarrollando las oposiciones, especialmente en ciudades como Valladolid, Salamanca o Zamora.
“Nos llegan quejas a diario. Hay aulas que superan los 32 grados. Esto no hay cuerpo que lo aguante”, trasladan desde el sindicato.
Desde el sindicato denuncian que la mayoría de los edificios que acogen estas pruebas, no cuentan con sistemas de climatización, la arquitectura es antigua, los techos son altos y muchas ventanas apenas se pueden abrir.
Con el repunte de temperaturas que afecta a la comunidad desde hace semanas, el panorama se agrava.
“No estamos hablando solo de incomodidad. Hay gente que se está mareando, que se deshidrata, que no puede concentrarse. Y eso puede marcar una oposición para siempre”, advierten.
Un riesgo real para la salud
Desde STECyL-i recuerdan que la normativa de prevención de riesgos laborales recomienda no superar los 27 grados en interiores.
“Aquí se sobrepasan con creces. Son condiciones que rozan lo temerario”, afirman. En las jornadas más duras, se acumulan varias horas de exposición oral, lectura de temas y correcciones, tanto para opositores como para los tribunales.
“Hay quien aguanta gracias a botellas congeladas, abanicos o ventiladores portátiles traídos de casa. Pero eso no debería ser responsabilidad de quienes se examinan”, denuncian.
Propuesta a la Consejería
Ante esta situación, el sindicato ha reclamado a la Consejería de Educación un plan de choque para climatizar los centros.
No se refieren a soluciones provisionales, sino a una intervención real: instalar sistemas de refrigeración, crear zonas de sombra, mejorar el aislamiento térmico y permitir cierta flexibilidad horaria en los días más extremos.
“No podemos permitir que, año tras año, el calor arruine el esfuerzo de miles de personas. Hay que actuar ya”, subrayan.
Las oposiciones docentes en Castilla y León se celebran cada verano. Empiezan a finales de junio y se prolongan durante todo julio. “El calor no es una sorpresa. Lo que sorprende es que no se tomen medidas”, insisten desde STECyL-i.