Por la recuperación del importe íntegro de las pagas extras
El Gobierno debe restituir, de una vez, el derecho que nos fue arrebatado hace catorce años y que nos ha supuesto una reducción en nuestras retribuciones. Reducción que se mantiene a día de hoy a pesar del crecimiento económico, la contención del gasto y del déficit, y a pesar del importantísimo papel que hizo el personal empleado público en la recuperación del país durante y después de la pandemia del Covid-19.
Si analizamos los datos, vemos como en el peor de los casos, un docente con una larga carrera que acumula 10 trienios, la perdida de poder adquisitivo acumulada y derivada de este recorte sobrepasa los 17.000 €.
En diciembre cobramos la segunda paga extraordinaria del año, pero no será íntegra. Desde 2010 las pagas extras han dejado de ser el doble de las nóminas ordinarias. Un recorte, excusado en la crisis financiera generada a finales de 2008. No hay excusas para mantener este recorte.
El expresidente Zapatero, en la recta final de su gobierno rebajó los salarios de los empleados públicos un 5 %, lo que fue un auténtico “arakiri” de su gobierno ante las presiones de los mercados. Posteriormente, el también expresidente Rajoy hizo lo propio de un modo indirecto, elevando el porcentaje de las retenciones por IRPF.
Se dijo que eran medidas transitorias hasta la mejora de la situación económica.
Todo lo anterior unido a unas “subidas salariales” posteriores por debajo de la inflación, mal negociadas por algunos sindicatos, nos han conducido a una pérdida de poder adquisitivo del 16% respecto a 2009.
El sistema bancario privado español recibió, según datos oficiales, unos 60.000 millones de euros para sacarlo de la crisis que su afán de lucro había generado al asumir más riesgos de los debidos. Otras fuentes, hablan de 100.500 millones de euros. En cualquier caso, la banca privada ha devuelto unos 9.500 millones, del resto ni ha hecho amortizaciones, ni se esperan, ni ha pagado intereses. ¿De dónde salió esa cantidad astronómica de dinero? De los recortes en el sector público, principalmente en la educación y en la sanidad, y de los recortes salariales a las trabajadoras y trabajadores de las diferentes administraciones.
Es momento de resarcir a las empleadas y empleados públicos, de los recortes salariales, empezando por el cobro de las pagas extraordinarias completas.