Porque salvar vidas es una obligación. Porque ningún ser humano es ilegal.
La Confederación Intersindical exige a la Unión Europea y al gobierno español que cumplan con su obligación humanitaria y no criminalicen las acciones de salvamento en el Mediterráneo.
Desde la Confederación Intersindical mostramos nuestra profunda preocupación ante el auge de la extrema derecha y el “alimento” a su racismo y xenofobia que les está dando la política de criminalización del salvamento humanitario y de [no] acogida de personas refugiadas.
Las recientes respuestas judiciales y amenazas contra las acciones de salvamento humanitarias del Open Arms y la ONG Sea Watch en el Mediterráneo, que tratan de salvar las vidas de las personas que escapan de la guerra y de la miseria, demuestran una vez más que la UE, Italia y el Estado Español están dando la espalda a los derechos humanos y al deber ineludible de salvar vidas en el mar.
Las multas con las que amenaza el Estado Español (de entre 300.000 y 901.000 euros) si se rescatan inmigrantes, a través de misivas del Ministerio de Fomento, suponen una escalada de represión hacia las personas migrantes y quienes tratan de cumplir la obligación internacional de salvamento. Es la expresión de una política dura anti inmigración que está dando alas a la extrema derecha, tanto en la UE como en España, y que es contraria a los principios fundacionales de la UE que protegen a las personas refugiadas.
Desde la Confederación Intersindical sentimos vergüenza y repulsa ante la actuación de las instituciones europeas, que no ponen todo su esfuerzo en resolver el gravísimo problema humanitario en el Mediterráneo. Sería necesario poner todo el empeño y energías en resolver el drama humano y la desgracia que lleva a la muerte por ahogamiento a niñas, niños y adultos, abandonados a su suerte en el Mediterráneo. Hace más de un año y medio, tuvo lugar el mayor naufragio de la historia, con más de 800 personas desaparecidas. Justo un año después, más de 1.000 personas han desaparecido en una sola semana en varios naufragios. No queremos que la UE impulse la criminalización de los rescates, como ya se está haciendo en la Italia de Salvini y a la que apunta el gobierno español.
Exigimos al recién constituido Parlamento Europeo y a todas sus instituciones, así como al Gobierno Español, que por justicia, dignidad y humanidad no dejen morir a miles de personas, miles de niñas y niños; no solo exigimos que permitan los rescates, sino que sean actores principales colaborando en ellos. Así mismo, exigimos que rechacen, y no adopten, el discurso de la extrema derecha de odio y xenofobia para blanquear las políticas fracasadas de austeridad.
Porque salvar vidas es una obligación. Porque ningún ser humano es ilegal. Porque Europa debería ser un refugio, por justicia y por responsabilidad.
Secretariado de la Confederación Intersindical | 4 de junio de 2019
