STECyL denuncia que las Cortes aprueben la Ley de Autoridad del Profesorado sin escuchar a los sindicatos
El sindicato considera que la ley no tiene efectos reales en la vida diaria de los centros educativos y que es una cortina de humo frente a otros problema de la educación.
rtvcyl.es – miércoles, 09 de abril de 2014
El sindicato STECyL denunció que las Cortes de Castilla y León aprueben la Ley de la Autoridad del Profesorado sin que ninguna formación haya consultado a los representantes de las familias y del alumnado, ni al profesorado para recabar su opinión sobre el proyecto de ley que ha debatido en los últimos meses.
El sindicato considera que se trata de una ley «jurídicamente controvertida, que, al igual que sucede con el reconocimiento de la LOMCE, no aporta nada verdaderamente nuevo ni para la mejora del clima escolar en los centros educativos, ni para la protección jurídica al profesorado, ni tampoco para promover la consideración social del trabajo del profesorado y el refuerzo de su profesionalidad».
Además, añaden desde STECyL estas normas, «tal y como está sucediendo en comunidades donde ya se han aprobado, no tienen efectos reales en la vida diaria de los centros educativos y pretenden servir de cortina de humo frente a otros problemas de la educación en España y en Castilla y León, a la que se está sometiendo a reformas impuestas y a los más intensos recortes en sus presupuestos». «Se trata de una ley que no se cree el profesorado, al que su ministro y secretaria de Estado en estos últimos cursos no cesan con muchas de sus declaraciones de desacreditar y desautorizar».
Ante esta situación, STECyL reclama un mayor reconocimiento social por parte de las familias, del alumnado, de la administración y de la sociedad en su conjunto hacia el trabajo de los docentes, «recuperando el convencimiento que este trabajo es esencial par el futuro de nuestro alumnado».
«Con un mayor reconocimiento de la función social del profesorado, mejoraría nuestra autoridad, la que cuenta de verdad en la relación diaria con el alumnado y con sus familias. Reconocimiento que no es otra cosa que respeto a nuestro trabajo. Esto pedimos a la administración y a las familias. Y que no nos desautoricen a la primera de cambio».
