Más barro para las universidades
EL PAÍS del 8 de julio nos informaba en primera página de la afirmación del secretario general de la OCDE, Angel Gurria, de que “el nivel de un titulado universitario español es similar al de un estudiante japonés de secundaria”. Este señor no acompañaba dicha afirmación, a todas luces lesiva para las universidades españolas, con prueba o estudio científico alguno, sencillamente porque no los hay. No hay nada similar al informe PISA que mida el nivel de los graduados universitarios. Por tanto se trata de una afirmación subjetiva y gratuita. Con la misma falta de razón podríamos afirmar que el nivel de los graduados japoneses es similar al de nuestros alumnos de secundaria.
Yo puedo aportar mi modesta experiencia de enviar alumnos Erasmus a Alemania durante 15 años y comprobar que se desenvuelven allí sin mayores dificultades y aprueban los estudios con notas similares a las de aquí. ¿Deberíamos concluir que el nivel de las universidades alemanas es también el de la enseñanza secundaria japonesa?
En la misma página de EL PAÍS se recoge (esta vez sí) un estudio de la OCDE sobre el subempleo de los titulados españoles y una afirmación del ministro Wert diciendo que nuestras universidades públicas son insostenibles. Me parecen excesivas informaciones negativas, todas ellas en la dirección de justificar una disminución del gasto público en educación superior. Y ello a la vez que surgen como setas nuevas universidades privadas, cuya más que discutible calidad nadie pone en cuestión. Y nuestros rectores, ¿no tienen nada que decir al respecto?