Compramos

Arsenio Terron Alfonso. Profesor Universidada de León

Arsenio Terron Alfonso. Profesor Universidad de León

Es tarde de invierno…

Que cae el empleo, compramos.
Que el planeta se calienta, compramos.
Que estrenan una superproducción americana, compramos.
Que el índice de incidencia de cáncer de piel, de próstata, de útero o de lo que sea sube, compramos.
Que no es posible formar un gobierno de derechas y muy conservador, pues entonces compramos.
Que pudiera ser posible que se formara un gobierno de izquierdas, un poquito de izquierdas, pues compramos también.
Que una comunidad autónoma rompe las reglas de juego y decide emprender un camino en solitario, pues compramos.
Que llueve, compramos.
Que hace mucho sol y nos agobia el calor, compramos bien fresquitos.
Que nos congelan el suelo o nos suben la pensión 1,6 € al mes, pues despilfarramos ese gran sobresueldo y compramos.
Que despiden a nuestra pareja, compramos.
Que nos despiden a nosotros, compramos para olvidar.
Que tenemos mucho, compramos para tener más.
Que tenemos poco, compramos para tener más.
Que lo tenemos todo, compramos por si alguien pudiera tener lo mismo que nosotros.
Que necesitamos algo, pues compramos.
Que no necesitamos nada, pues compramos.
Que no necesitamos nada pero alguien nos dice que carecemos de ello, pues compramos.
Que se nos estropea algo, compramos.
Que no se nos estropea, pues compramos antes de que pueda estropearse.
Que nos dan una buena noticia, compramos.
Que nos dan noticias pésimas, compramos para consolarnos.
Compramos, compramos y compramos y además nos convencen o nos convencemos nosotros mismos de que es necesario comprar como el único modo de reactivar la economía y volver a vivir como antes, como si eso fuera lo mejor.

Realmente somos una sociedad enferma. Nos importa lo que cuesta algo e ignoramos lo que vale. Comprar de manera responsable es un arma de presente y de futuro que asusta a los poderosos. No comprar más allá de lo necesario nos hace más libres.

Veo desde mi ventana que está nevando, debe ser una mañana de invierno y no quiero comprar…

También te podría gustar...